miércoles, 14 de enero de 2009

La ermita de Polvoranca de Leganés se está cayendo a trozos


En el siglo XVII, momento de máxima población con casi trescientos vecinos, se construye la Iglesia de San Pedro Apóstol, de estilo barroco, sobre los restos de una antigua ermita bajomedieval (quizás mudéjar). Es todo lo que nos queda del antiguo poblado de Polvoranca, fundado en el siglo XI, incendiado y arrasado a causa de una epidemia de peste en las postrimerías del XVIII y que Pérez Galdós llega incluso a mencionar en su obra "Nazarín". "Tierra fría y llana; pobre de leña y de pan, de vino mediana, de ganado no iba mal", así reza la leyenda.

La obra es realizada por los arquitectos reales Francisco de Mora y su sobrino Juan Gómez de Mora y se construye con ladrillo toledano y madrileño. A partir del siglo XVIII (Edad Moderna), mientras en Polvoranca se mantienen estructuras feudales, en la vecina Leganés, su economía y su sociedad, se ven beneficiadas por el efecto de proximidad a la Corte de Madrid. Se construyen entonces el Cuartel de Guardas Valonas y la Iglesia del Salvador, con retablo de Churriguera. Todavía son visibles los restos de las casas señoriales que se encontraban cerca de la iglesia.



Desde el siglo XV hasta el siglo XX, las tierras de Polvoranca cambian de dueño varias veces, pero permanecen siempre en manos de la nobleza. El lugar es testigo además del paso de personajes como el poeta Fray Luis de León, quien frecuenta el lugar entre 1570 y 1590, y Don Juan de Austria (siglo XVI), hijo ilegítimo de Carlos I y hermanastro de Felipe II, a quien intenta disputar el trono en la rebelión morisca de las Alpujarras (1568-1571) .

A lo largo del siglo XIX, el lugar queda definitivamente abandonado y pasa a denominarse el “despoblado de Polvoranca”, y ya en el siglo XX, es conocido también como “La Polvoranca”. Tantos contratiempos acumulados a lo largo de siglos (pestes, éxodos, hambrunas, abandonos...) diluye la vocación de Polvoranca como pueblo y le otorga una leyenda maldita de lugar invivible.


Hoy en día, la imagen de sus ruinas constituye un símbolo del parque. Es un edificio que lleva abandonado más de treinta años, degradándose de forma progresiva sin que nadie que tenga intención de poner remedio. Una ruina que nos reprocha de forma tácita, en silencio, la desidia, la estulticia y el abandono al que sometemos nuestro legado histórico, artístico y cultural. Ciudadanos por el cambio en Leganés lleva todas las navidades advirtiendo de esta situación en este blog. A ver si con este artículo ayudamos a que los políticos les hagan caso.

3 comentarios :

  1. Ésta es la vergüenza  municipal de Leganés  dejar abandonado el patrimonio histórico de la ciudad  y encima  el Alcalde  se compra un coche de 80.000 euros. de los fondos publicos  en vez de preocuparse del pueblo y tambien restaurar  la Iglesia  de San Pedro Apostol  que se esta cayendo a cachos, porque el tiempo no perdona, y de las inclemencias de las estaciones;  se lo  mereze  ya que perteneze al a nuestro patrimonio historico aunque parece  que los políticos de  la cuidad  les importa bien poco; por lo que veo,   solo les importa sus intereses  y sus  bolsillos  yo como ciudadano de leganes me siento  indignado por este asunto de la Iglesia de San Pedro Apóstol  que se preocupen en su restauracion lo antes posible para que sea un interés de nivel cultural, que tanta falta le hace al pueblo.

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  2. He estado el pasado domingo  y entre en ela iglesia y es una verguenxa como tienen eso asi o lo arreglan o lo tiran pero ahora mismo m parece una verguenza tenr eso asi 

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  3. Miguel Angel, un pepinero29 de agosto de 2013, 21:39:00 CEST

    Miguel Ángel,
    Soy una persona dedicada a la profesión de restaurador de nuestros patrimonios culturales, y un fiel defensor de que los mismos se defiendan dentro de las normas que debemos mantener este pueblo. Estoy leyendo todos los mensajes que cada uno dejamos, y todavía no he visto que nadie se quiera manchar las manos de argamasa, para ponernos a levantar esta disnea construcción que cada día desaparece un poco mas. Porque en vez de pensar en los políticos, que ya sabemos todos de que pie cojean, aunque los hemos puesto nosotros con nuestro voto.
    Propongo, desde mi saber de que va este tema, una plataforma de gente que de verdad quiera que esta ermita recobre aquel esplendor para la que fue construida, y que haga que Leganés como pueblo,(ciudadanos), asi lo vean, para ello hay que contar con el esfuerzo personal, y buscar el apoyo económico, que seguro que entre todos con ganas se conseguirá, y esperemos que esos políticos a los que les gusta aparecer en la foto, también sepan estar al pie del andamio cuando haga falta. Animo, os espero, gracias.

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